Cuando estoy en clase me imagino cómo deben ser mis compañeros en la cama, me da mucho morbo pensar en ello, incluso me pone cachonda mirarles e imaginar cosas en clase. Soy una chica muy caliente y con muchas ganas de aprender cosas. Por eso soy escort en Universitarias Catalanas.
Me encanta que me miren los chicos de mi clase y de mi facultad, incluso por la calle o en el transporte público. Me doy cuenta de lo mucho que se me quedan mirando y eso me pone mucho. En cada encuentro con los clientes aprendo un poco más, y el misterio de no saber cómo será el cliente es algo que te hace ponerte nerviosa y que te suba la adrenalina. También me imagino si algún chico que me cruce por la calle sería cliente de una escort como yo.
Un cliente que ya conozcas
A veces pienso si alguna vez tendré un cliente que ya pueda conocer, ya sea algun chico de mi barrio, algún amigo o ex de mis mejores amigas e incluso algún compañero de clase. Esto último me pone de lo más cachonda, son todos muy guapos y simpáticos, la mayoría van al gimnasio y veo que se cuidan. No se si estarían dispuestos a pasar un buen rato con una escort, pero si supieran que yo lo soy más de uno acudiría a mis servicios…
Ser escort ha hecho que me diera cuenta de que todo el sexo que había practicado y disfrutado antes no es nada comparado con las experiencias que tengo ahora. Con cada cliente vivo algo distinto y descubro nuevas maneras de obtener y dar placer. Por eso no me arrepiento de ser una escort de lujo: a parte de disfrutar con mis clientes también aprendo de ellos. Es un modo de vida que a más de uno le sorprendería. ¡Y a mi me encanta! ¿Te pasas por Universitarias Catalanas y nos descubrimos?